Consta de 3 libros escritos por Maria Valtorta, producidos entre 1943 y 1950 como testimonio luminoso de la presencia de Dios.
En sus páginas se descubre con sobriedad y ternura la oblación de una mujer que se va haciendo instrumento incondicional de gracia. El deseo de total fidelidad a la Voluntad Divina y la aspiración sincera a la santidad, haciéndonos partícipes de la experiencia sobrenatural de la escritora a la que sólo le interesa transmitirlo que ha recibido.
Estos escritos nos aportan respuestas concretas a situaciones vitales interpretadas a la luz del mensaje evangélico.